El cultivo hidropónico se ha vuelto cada vez más popular entre agricultores ecológicos alrededor del mundo. Es un método en el que se pueden producir los alimentos de forma totalmente natural. Aquí te explicaremos en qué consiste.

El cultivo hidropónico
Básicamente, el cultivo hidropónico no necesita tierra, por lo que desplaza un poco el cultivo tradicional de arado y tierra, además de no necesitar e uso de pesticidas o químicos parecidos.
Es decir que un huerto o cultivo hidropónico funcionará en suspensión, es decir, con las raíces hacia arriba. Las plantas se soportarán de diversas formas, y pueden utilizarse sustratos diferentes desde la raíz, la grava y la espuma.
Por supuesto, cualquier tipo de cultivo necesita agua, por lo que es importante siempre el riego constante dependiendo de lo que se esté cultivando. Un huerto hidropónico es una manera sustentable de cultivar y a pesar de que antiguas civilizaciones lo hacían, es bastante moderno.
Tipos
Existen tipos de cultivos hidropónicos dependiendo del nivel de tecnología que utilicen:
- De alta tecnología: Estos suelen ser invernaderos de sistemas automatizados y de última generación que controlan cada uno de los aspectos, desde el clima hasta los sustratos.
- De media a baja tecnología: Estos suelen ser menos automatizados y se usan materiales de bajo costo o incluso reciclados. Por lo general estos también son los cultivos hidropónicos caseros o de comunidades de bajos recursos.
¿Cómo hacer y mantener un cultivo hidropónico en casa?
Primero que nada, es importante contar con todos los implementos necesarios para crear el cultivo hidropónico. Estos serían un par de recipientes plásticos medianos, un sistema de ventilación que puede ser una bomba de pecera, el sustrato que sustituirá a la tierra y unas plantas o semillas que pueden adquirirse en cualquier tienda de horticultura.
Paso 1
El primer paso es tener los recipientes plásticos listos. Debe cortarse ya sea de forma horizontal o vertical dependiendo de cuántas plantas esperas cultivar. Estos recipientes se llenarán con el sustrato que hayas escogido que debe ser humedecido previamente con agua.
Paso 2
Una vez colocado el sustrato, debes abrir unos pequeños huecos en donde colocarás las plantas o semillas de preferencia. Una vez que se hayan introducido en los orificios, se coloca más sustrato por encima, sin presionar muy fuerte.
Paso 3
Hay que mantener el sustrato siempre humedecido, con buena ventilación y con suficiente luz solar. Hay ciertas especies de plantas que se dan muy bien mediante el cultivo hidropónico, por ejemplo el cilantro y el perejil.
Hay dos cosas que es importante tener en cuenta. Primero, el sustrato que reemplazará la tierra en el cultivo debe ser de calidad y suficiente para que sostenga las raíces de las plantas. Su función, además de ser mediador para que las plantas se den, es la de proteger de la luz y dar oxigenación a las mismas.
Segundo, el agua aportará a las plantas todos los nutrientes necesarios para que crezcan de forma sana. Estos nutrientes van desde calcio, fósforo, zinc, nitrógeno y oxígeno.
Beneficios de un cultivo hidropónico
- Las plantas estarán siempre húmedas sin importar el clima externo, ya que el sistema mantiene las raíces.
- No hay excesivo gasto de agua, ya que el agua que se utiliza puede reutilizarse. Tampoco hay necesidad de usar fertilizantes.
- No hay problemas con excesos de irrigación, y de hecho puede asegurarse que se da de forma constante.
- No habrás problemas con enfermedades propias del suelo que puedan dañar las plantas.
- Se puede hacer en lugares pequeños, por lo que es ideal para casas u hogares con poco espacio.
- Se producen plantas 100% naturales y orgánicas.
Problemas y desventajas
A continuación, analizaremos algunos de los principales inconvenientes que pueden surgir al cultivar plantas utilizando este método.
Uno de los problemas más comunes en el cultivo hidropónico es la susceptibilidad a enfermedades y plagas. Al no utilizar suelo como medio de crecimiento, las plantas pueden ser más vulnerables a ciertos patógenos y organismos dañinos. Es importante implementar medidas preventivas adecuadas para evitar la propagación de enfermedades y mantener un control efectivo sobre las plagas.
Otro desafío del cultivo hidropónico es el mantenimiento adecuado del equilibrio nutricional. Las plantas dependen de una combinación precisa de nutrientes para crecer saludablemente, y en el cultivo hidropónico es necesario proporcionar estos nutrientes directamente al agua que rodea las raíces. Si no se monitorea correctamente la composición de los nutrientes o si se produce un desequilibrio, las plantas pueden sufrir deficiencias o toxicidad nutricional.
Además, el costo inicial del establecimiento de un sistema hidropónico puede ser significativamente mayor que el del cultivo tradicional en suelo. Se requiere una inversión en equipos especializados como bombas, sistemas de riego automatizados y soluciones nutritivas específicas. Esto puede limitar la accesibilidad del cultivo hidropónico para algunos agricultores o pequeños productores.
Por último, otro aspecto a considerar es la dependencia energética en los sistemas hidropónicos. Estos sistemas requieren iluminación artificial para suplir la falta de luz solar directa, lo que puede aumentar el consumo de energía. Es importante evaluar el impacto ambiental y los costos asociados a este consumo energético adicional.
A pesar de estos problemas y desventajas, el cultivo hidropónico sigue siendo una técnica prometedora en la agricultura moderna. Con un manejo adecuado y una atención constante a los factores mencionados, es posible superar estos obstáculos y aprovechar los beneficios que ofrece esta forma de cultivo.